La Chocolata, comida verdaderamente mexicana
Otro restaurante mexicano de neones y de comida rica. La Chocolata. Intentando y fracasando en visitar el Altar de los Muertos de la Casa de México parcheamos visitando este local, amplio y moderno, de la calle Alberto Aguilera 30.
La Chocolata es un restaurante de comida mexicana en el que disfrutar un poquito de esta gastronomía. De unos tacos, unas enchiladas, unos nachos, unas chelas, unos cocteles… Y de mucho más. Te sorprenderá además en las papilas de lo rico que está. La Chocolata forma parte del grupo de restauración que también lleva La Taquería del Alamillo, uno de los clásicos de la cocina mexicana en Madrid por décadas ya.
La cena empezó con unos totopos con carne. Jugando a lo seguro. Acertando. Son raciones no especialmente grandes, pero cierto es que son raciones bien cargadas. Carne bistec, guacamole, salsa de queso (un poco industrial la sensación), pico de gallo y unos totopos bastante ricos. 15 euros.

Tacos en La Chocolata
Tacos de Bistec (12 euros) fueron los primeros en ser elegidos. Las tortillas de maíz se acompañan de bistec a la plancha. También de cebolla y cilantro. Son buenos tacos para tomar aunque no destacan por nada especialmente. Pero ricos tacos.

Después un clásico de los restaurantes mexicanos en Madrid y allá donde vayas: los Tacos al Pastor (13 euros). Carne de cerdo (puerco) marinada y especiada servida con cebolla, más cilantro y el toque fresco de la piña. Un poco secos pero de buen sabor.

También se pidieron unos Tacos de Birria (15 euros). Estos tacos me da la impresión que son los que más de moda están, quizás por lo rico de la idea. Tacos con carne de res en adobo cocinado a baja temperatura por horas con queso, cebolla y, claro, cilantro. Con su bolecito con el caldo de birria en el que sumergirlos para elevar el sabor.

Por último nos llegaron a la mesa unas flautas de Pollo (12 euros). Tres flautas rellenas de pollo y queso, con crema, lechuga, cebolla y el habitual cilantro. Con trozos de aguacate acompañando. Un buen plato para compartir y variar.

Para beber tienen unas cuantas cervezas mexicanas. Las habituales. Y también tienen una propuesta de cócteles (8 euros) que van de combinaciones muy mexicanas a otras más habituales. Por ejemplo, el Amores mexicanos con flor de jamaica, mezcal y cítricos acompaña perfecto.

El estómago de los postres no fue ignorado. Hubo una comanda más mexicana y otra más global. La mexicana fue el Pan de elote asado (8 euros). El elote es una mazorca tierna de maíz que se usa en uno de los postres más típicos de México. Aquí con moras con bayleis y coco tostado. Rico, un poco pesado. Pero rico. También hubo una tarta de queso con mermelada de frutos rojos (8 euros). Buena porción, sencilla y buena.

